(Música> Carrera de bicicletas- Reina)
Mi madre, desde que mi abuelita murió, casi no soñó con ella (o creo que de hecho no la había soñado en absoluto) y recién la semana pasada cuando íbamos camino a casa me empezó a decir, muy emocionada que había soñado con mi abuelita. Esto es lo que mi mamá me contó:
“Soñé a tu abuelita (dice con tono de emoción) Fue un sueño muy bonito. De hecho me desperté hasta llorando.
Soñé que estaba en el funeral de tu abuelita, pero era como un funeral de una persona famosa, lo estaban haciendo como un evento grande, en un estadio repleto de gente. Yo iba por la calle, cuando se me acerca alguien y me dice ‘¡Lulú, Lulú, rápido, que tu mamá ya despertó!” Entonces yo fui corriendo hacia el estadio y en la entrada habían personas encargadas de la seguridad. Una muchacha que era del equipo de seguridad me detuvo a la entrada y me dijo que no podía pasar. Yo me enojé y empecé a gritarle ‘¡Quítate, no me detengas! ¡Cuando todo esto sea mío te echaré a patadas de aquí!’ Y seguí corriendo hasta que me topé con un muchacho que también estaba encargado de la seguridad. Yo le dije ‘¡Rápido, rápido, llévenme con mi mamá!’ Y el muchacho me llevo a través del estadio lleno de gente hasta que llegamos a una especie de estructura de madera muy alta sobre la que estaba el ataúd. Al llegar hasta arriba, donde estaba el ataúd, había un escalón que separaba de ahí y tenía qué saltar para librar ese obstáculo. Entonces brinqué y llegué a la plataforma donde estaba el ataúd de tu abuelita y la vi envuelta en sábanas blancas, pero estaba como despertándose, como estirándose y desperezándose. Mientras ella seguía desenvolviéndose de las cobijas y despertándose yo empecé a sobarle las piernas y a decirle ¡Mamá, mamá, ya estoy aquí!’ Y entonces la vi despertar, pero se veía gordita y sonriente, sonrosada, así como la conocimos en vida. Yo empecé a decirle ¡Mamá, dígame algo!’ Y entonces ella puso sus labios como para darme un beso en los labios (Llegando a esta parte de su relato, mi mamá ya tenía quebrada la voz y lloraba, y yo también estaba llorando) Y justo cuando le iba a dar el beso, me desperté por la emoción y estaba llorando… y empecé a decir ‘Mamá, vino a despedirse de mí ¿Verdad? Como no me pudo decir adiós, vino a despedirse de mí…’
Yo sí que he soñado mucho a mi abuelita. A decir verdad, la he soñado tanto que en mis sueños es un personaje recurrente a tal grado que cuando me la encuentro en mis sueños, la saludo, le hablo o bromeo con ella y sigo haciendo mis cosas en el sueño, igual que cuando ella vivía, como si mi abue siguiera ahí y nunca se hubiera ido.
lunes, 31 de agosto de 2009
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3 comentarios:
:) Espero que prontito mi abuelo venga a despedirse.
Vaya, Tintinea, no lo apresures... quizá esté ocupado =p
Lindo sueño... efectivamente ella vino a despedirse... qué lindo gesto!
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